El constante avance tecnológico ha llevado consigo el incremento de la ciberdelincuencia, siendo los bancos un blanco recurrente de ataques. A pesar de que la mayoría de estos ataques son frenados, episodios icónicos han permeado los sistemas financieros, enseñando lecciones cruciales. 

Cristián Vega, gerente de operaciones y tecnología de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras de Chile (ABIF), destaca la importancia de la colaboración y el monitoreo constante para mitigar los impactos de ciberataques a nivel institucional.

En respuesta a la evolución de las amenazas, los bancos chilenos han adoptado medidas proactivas. Se ha implementado un modelo de tres líneas de defensa como estrategia de ciberseguridad, actualizando políticas y realizando campañas de phishing ético. 

Otras instituciones han destinado parte importante de su presupuesto anual a tecnologías en ciberseguridad, fortaleciendo su infraestructura con machine learning e inteligencia artificial.

A pesar de estos avances, existen retos pendientes. Aunque la banca chilena muestra una madurez destacada en comparación con la región, Cristián Vega sugiere mejorar el marco legal en ciberseguridad para una persecución más efectiva de delitos. 

Actualmente, en el Congreso se debate un proyecto de Ley Marco sobre Ciberseguridad e Infraestructura Crítica, que incluye la creación de una Agencia Nacional de Ciberseguridad. 

En conclusión, la ciberseguridad en la banca chilena avanza con estrategias coordinadas, capacitación y adopción de tecnologías innovadoras. Aunque se han logrado avances significativos, la colaboración continua y la adaptación a los riesgos emergentes son esenciales para mantener la integridad de los sistemas financieros en el futuro.